Plantillas ortopédicas personalizadas: solución a medida

Las plantillas personalizadas son un producto ortopédico que se utiliza para corregir anomalías en la forma del pie o en la marcha, prevenir la aparición de estas anomalías o descargar ciertas partes del pie para otros fines, como en el caso de heridas, úlceras o patologías musculares. Tener en cuenta que cada pie es único y que las plantillas deben adaptarse a las necesidades específicas de cada paciente.

Índice
  1. ¿Cuándo utilizar plantillas ortopédicas?
  2. Plantillas ortopédicas para niños
  3. Plantillas ortopédicas para adultos
  4. Tipos de plantillas ortopédicas según su fabricación
  5. Seguimiento y vida útil de las plantillas ortopédicas
  6. Confección de plantillas personalizadas a partir de molde
  7. Consultas habituales sobre plantillas ortopédicas

¿Cuándo utilizar plantillas ortopédicas?

El pie se va deformando a lo largo de toda nuestra vida adulta, pero no todos necesitamos usar plantillas. Pequeñas desviaciones que no causen dolor no tienen por qué perjudicarnos a lo largo de la vida. Sin embargo, si experimentamos dolor, cansancio o desgaste irregular del calzado, es recomendable utilizar plantillas ortopédicas, ya que estos problemas pueden mitigarse o desaparecer por completo con su uso.

Las plantillas también pueden ser especialmente útiles en ciertos casos, como en el deporte, donde ayudan a minimizar el sobreesfuerzo del miembro inferior y distribuir mejor las cargas, evitando lesiones y deterioro de las estructuras corporales.

Plantillas ortopédicas para niños

En los niños, cuyos pies aún están en formación y no han completado el endurecimiento de los huesos, el tratamiento con plantillas puede corregir la forma del pie. Aunque la respuesta al tratamiento puede variar en cada niño, en general, se observa una mejora en las patologías con el uso de plantillas y siguiendo las indicaciones del podólogo.

Al usar plantillas, el pie del niño se ve forzado a estar en la posición correcta, lo que permite un desarrollo adecuado de las estructuras y, en muchos casos, puede evitar la necesidad de utilizar plantillas en el futuro una vez que el pie se haya formado correctamente.

Plantillas ortopédicas para adultos

En el caso de los adultos, cuyos pies tienden a ser más rígidos y los huesos están osificados, el uso de plantillas permite alinear las estructuras del cuerpo, evitando el avance de la artrosis, reduciendo el desgaste articular y mejorando la marcha y carrera. Además, ayuda a disminuir los dolores en general y a mantener la musculatura descansada.

Tener en cuenta que el pie volverá a su mal posicionamiento una vez que se deje de utilizar las plantillas, por lo que es recomendable utilizarlas de forma continua para obtener los mejores resultados.

Tipos de plantillas ortopédicas según su fabricación

Existen diferentes tipos de plantillas ortopédicas según su fabricación:

  • Plantillas prefabricadas: Estas plantillas están hechas en serie y son estándar. No garantizan una adaptación correcta ni un nivel de corrección adecuado, ya que no se ajustan a las necesidades individuales de cada paciente.
  • Plantillas por elementos: Estas plantillas se caracterizan por ser creadas a través de mediciones del pie y la elección de la pieza que mejor se adapte a la patología del paciente. Aunque son más personalizadas que las prefabricadas, a veces pueden requerir un período de adaptación.
  • Plantillas a partir de molde: Estas plantillas se elaboran a partir de un estudio biomecánico y anatómico del paciente. Se toma un molde del pie en la posición correcta y se obtiene un positivo del pie del paciente. Esto permite al profesional de la podología crear plantillas totalmente personalizadas, utilizando los materiales adecuados y con el grado de corrección exacto que se necesita.

Las plantillas a partir de molde son las más recomendables, ya que son las más duraderas y se pueden modificar si es necesario. Además, suelen ofrecer una adaptación más precisa y efectiva.

Seguimiento y vida útil de las plantillas ortopédicas

Es importante realizar un seguimiento de las plantillas ortopédicas prescritas por un profesional sanitario, como un podólogo. En el caso de los niños, se suelen realizar revisiones cada 3 o 6 meses para garantizar que las plantillas estén cumpliendo su función y para detectar cualquier cambio en el crecimiento o desarrollo del pie.

En los adultos, se suele realizar una revisión a los pocos meses de uso para evaluar la efectividad de las plantillas y realizar las modificaciones necesarias. Además, es recomendable realizar revisiones periódicas para garantizar que las plantillas estén en buen estado y cumplan su función correctamente.

En cuanto a la vida útil de las plantillas ortopédicas, se recomienda hacer una nueva plantilla cada año y desechar aquellas que tienen más de 2 años. Esto se debe a que los materiales pueden perder propiedades y deteriorarse con el tiempo y el uso constante.

Confección de plantillas personalizadas a partir de molde

Las plantillas personalizadas se elaboran principalmente con materiales termoplásticos, que se moldean con calor. También se pueden utilizar otros materiales, como piel o espuma de látex, aunque en menor medida.

El proceso de confección de las plantillas personalizadas comienza con la toma de un molde del pie en consulta por parte de un profesional. Este molde se rellena con escayola para obtener un positivo, que es una réplica del pie en la posición adecuada. A partir de este positivo, se realizan las modificaciones necesarias y se toman las medidas oportunas.

Los materiales se seleccionan cuidadosamente y se montan según las necesidades de cada paciente. Luego, la plantilla se calienta y se adapta al positivo del pie utilizando un horno o una máquina de vacío. En algunos casos, se pueden añadir elementos adicionales a la plantilla una vez que se ha adaptado al pie del paciente. Finalmente, se pulen las imperfecciones para obtener un acabado profesional.

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Es importante realizar pruebas y mediciones con el paciente para garantizar que las plantillas cumplan su función de manera efectiva.

Consultas habituales sobre plantillas ortopédicas

  • ¿Qué tipos de plantillas ortopédicas hay? Hay varios tipos de plantillas ortopédicas según su fabricación y función. Según su fabricación, se pueden distinguir entre plantillas prefabricadas, plantillas por elementos y plantillas a partir de molde. Según su función, se pueden clasificar como plantillas correctoras (solo para niños), plantillas terapéuticas y plantillas acomodativas.
  • ¿Cuándo es recomendable usar plantillas ortopédicas? Se recomienda utilizar plantillas ortopédicas cuando se experimenta dolor, cansancio o desgaste irregular del calzado. Estas plantillas pueden mitigar o eliminar por completo estos problemas.
  • ¿Qué corrigen las plantillas ortopédicas? Las plantillas ortopédicas personalizadas se utilizan para corregir anomalías en la forma del pie o en la marcha, prevenir su aparición o descargar ciertas partes del pie para otros fines.

Las plantillas ortopédicas personalizadas son una solución efectiva para corregir anomalías en la forma del pie o en la marcha, prevenir su aparición o descargar ciertas partes del pie. Es importante utilizar plantillas adecuadas a las necesidades individuales de cada paciente y realizar un seguimiento periódico para garantizar su efectividad. Si experimentas dolor, cansancio o desgaste irregular del calzado, es recomendable consultar a un podólogo para evaluar la necesidad de utilizar plantillas ortopédicas.

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