Mejora tus finanzas: inteligencia financiera

En algún momento te habrás preguntado: ¿Cuál es la mejor forma de empezar a mejorar mis finanzas personales y comenzar en el entorno de las inversiones? Pues el primer paso que debes dar es aprender sobre inteligencia financiera.

Esta útil herramienta no solo te ayudará a conocer cuáles son esos hábitos que afectan tu economía, sino que también te ayudará a solventarlos, a generar mejores hábitos financieros y aumentar tus fuentes de ingresos. Así que sin más que decir, ¡vamos a ello!

¿Qué es la inteligencia financiera?

Para Robert Kiyosaki, el autor de Padre rico, padre pobre, la inteligencia financiera es la capacidad de descubrir las buenas oportunidades y saber de dónde y hacia dónde fluyen. Es decir, representa la inteligencia que utilizamos para resolver o sortear nuestros problemas financieros.

Contar con inteligencia financiera te dará la capacidad de analizar, comparar y tomar decisiones con respecto a oportunidades de inversión o gastos innecesarios que puedan afectar nuestra economía.

En palabras sencillas, podríamos decir que esta herramienta nos hace tomar mejores decisiones con respecto a nuestras finanzas personales y, si se aplica de la forma correcta, puede tener excelentes resultados en el largo plazo.

Un ejemplo de cómo puedes empezar a aplicar este tipo de inteligencia en tu vida es analizando cuánto gastas en servicios de cable o streaming al mes para tomar conciencia de cuánto exactamente usas cada servicio y cuánto podrías ahorrarte de no tener ese gasto.

¿Para qué sirve la inteligencia financiera?

El principal objetivo de esta herramienta es controlar tus fuentes de ingresos para que, eventualmente, logres tu libertad financiera, generes ingresos pasivos y asegures tu futuro. Estos objetivos pueden parecer un poco difíciles al inicio, pero con la suficiente práctica y control, lograrás llegar a ser financieramente independiente.

A pesar de que pasamos por diferentes etapas de educación, en muchos casos la educación financiera tiende a pasar desapercibida. Esta fuente de conocimiento te ayudará a entender exactamente cómo, dónde y qué es lo que tienes que hacer para asegurar tu futuro financiero.

Optimizar esta inteligencia te ayudará a tener dinero suficiente para asegurar tu futuro, tener mejores hábitos financieros, mejorar tu poder adquisitivo y a convertirte en una persona financieramente responsable, ¡algo imprescindible si deseas invertir en un futuro!

3 consejos para mejorar tu inteligencia financiera

Ahora que sabes un poco más sobre qué es la inteligencia financiera y para qué sirve, es momento de ver algunos consejos para que puedas mejorarla y empezar a cambiar tus finanzas personales. ¡Comencemos!

Controla tus gastos

Empezar a tomar conciencia de los pequeños gastos innecesarios o gastos hormigas es la primera tarea que debes asumir para empezar a mejorar tus finanzas.

Toma en consideración que recortar gastos en ocasiones significa privarnos de algunas cosas que nos gustan, lo cual suele ser difícil pues son acciones más emocionales que racionales, por lo que estos cambios requerirán inteligencia emocional de tu parte.

En esos momentos, recuerda que aprender a controlar estos gastos te ayudará a tener más control sobre tu dinero y tus ahorros. Además, el dinero que te ahorres podrás destinarlo a otras fuentes como saldar deudas, nuevos proyectos o ese viaje increíble que quieres hacer desde hace tiempo.

Haz un plan financiero

Ahora que ya recortaste estos pequeños gastos, es momento de empezar a pensar qué hacer con ese dinero, porque ahorrarlo no servirá de mucho a menos que establezcas un plan que te ayude a tener control.

Elaborar un plan financiero para establecer cuáles serán los gastos del mes y dejar claro cuales son tus prioridades es la mejor forma de organizarte y controlar tus gastos. Cabe destacar que dentro de este plan se incluyen tus gastos fijos como el alquiler, servicios públicos, préstamos, entre otros.

No obstante, ten en cuenta que la diversión es parte del ser humano, así que también debes incluir pequeños gastos que quieras hacer en gustos como una eventual golosina, salidas al cine o cualquier otra forma de recreación.

Con este plan se busca que aprendas a controlar y medir estos gastos de una forma saludable y económicamente eficiente. Mantener este equilibrio te ayudará a solventar tus problemas financieros y a ordenar la cantidad de dinero que gastas en el mes, mientras que sigues disfrutando de algunas cosas que te gustan.

Si no estableces un plan financiero, es muy probable que rápidamente caigas en viejos hábitos y empieces a gastar como antes, así que te recordamos que durante todo el proceso mantengas tu inteligencia emocional para evitarlo.

Controlar tus emociones, y no dejarte llevar por impulsos, te mantendrá dentro del buen camino del ahorro y la inversión.

Crea nuevas fuentes de ingresos

Trabajar en tu inteligencia financiera no solo es gastos y ahorro, también es aprender a invertir en nuevas ideas y empezar a entender cuales son las formas de que tu dinero empiece a trabajar por ti.

Diversificar tus fuentes de ingresos puede hacerse de muchas maneras. Puedes invertir en nuestra plataforma de crowdfunding y empezar a generar ingresos pasivos, como también puedes invertir en fondos de inversión, emprender nuevas ideas o invertir en ti mismo por medio de la educación o herramientas para tu desarrollo profesional.

La mejor forma de empezar a diversificar tu dinero es conformar una tesis de inversión, esta herramienta te ayudará a definir en qué invertir y en qué no. Además, te ayudará a sentar las bases para empezar a comprender conceptos como el de portafolio de inversión y horizonte de tiempo, los cuales son cruciales si quieres emprender este camino.

No olvides, que si te estás iniciando en el entorno de las inversiones y las finanzas personales, puedes revisar nuestra sección de ArkEducation, donde encontrarás herramientas para asegurar tu futuro financiero y mucho más. ¡Te esperamos!

Luis X. Barrios

Hoy, queremos hablar de un concepto muy relevante para mejorar tus finanzas personales: qué es la inteligencia financiera. Y es que se trata de una cualidad que se puede adquirir y desarrollar, teniendo un impacto muy positivo en nuestra salud financiera. Si quieres conocer más sobre este término, no te pierdas este artículo sobre qué es la inteligencia financiera, por qué es importante, dónde puedes aplicarla, cómo adquirirla y una serie de consejos para desarrollarla.

Qué es la inteligencia financiera

Entendemos por inteligencia financiera los conocimientos que aplicamos en la gestión de nuestras finanzas personales. Podríamos identificarlo con la inteligencia que utilizamos para la toma de decisiones, resolución de problemas y correcta gestión de nuestro dinero.

Pilares de la inteligencia financiera

Para entender qué es la inteligencia financiera, debemos resaltar que se basa en tres pilares principales, que, a su vez, se corresponden con tres áreas fundamentales de las finanzas personales:

• Contención del gasto innecesario: Este pilar se refiere a la capacidad de controlar y reducir los gastos superfluos en nuestras vidas. Esto implica identificar los gastos que no son prioritarios y tomar medidas para limitarlos.
• Desarrollo de estrategias de ahorro y consumo: Este pilar implica la habilidad de planificar y ejecutar estrategias de ahorro eficientes, así como de consumir de manera inteligente y responsable. Esto implica establecer metas de ahorro, crear un presupuesto y tomar decisiones informadas sobre nuestras compras.
• Generación de nuevos ingresos: Este pilar se refiere a la capacidad de buscar y aprovechar oportunidades para aumentar nuestros ingresos. Esto puede incluir la búsqueda de empleos adicionales, la inversión en activos que generen ingresos pasivos y el desarrollo de habilidades y conocimientos que nos permitan ganar más dinero.

Por qué es importante la inteligencia financiera

Ahora que sabes qué es la inteligencia financiera, puedes intuir su importancia; y es que una de sus principales virtudes es que ayuda a tomar decisiones correctas sobre el dinero, evitando cometer errores en la gestión de tus finanzas personales. Esto es aplicable a todas las áreas de tu economía, desde la gestión de tu presupuesto personal, a la selección del mejor plan de pensiones, pasando por el seguro de hogar, la reducción de deudas o la configuración de la cartera de inversión.

Inteligencia financiera y educación financiera

En nuestra explicación sobre qué es la inteligencia financiera, es importante relacionar este concepto con la educación financiera. Como decíamos al principio de este artículo, la inteligencia financiera es una habilidad que no es innata, sino que es posible adquirirla y mejorarla mediante la formación; Existen diversidad de noticias en los medios de comunicación que te ayudarán en este propósito; también puedes seguir blogs sobre la materia, como el nuestro, y, especialmente, hay escuelas como Método Free, Escuela de Educación Financiera que te pueden ayudar a ampliar tus conocimientos.

Cómo adquirir inteligencia financiera

Si quieres comenzar tu formación en las áreas que te pueden ayudar a adquirir inteligencia financiera, te recordamos nuestro programa de educación financiera. Y es que el primer paso en este propósito es entender la realidad macroeconómica que afecta a la economía de tu hogar y la aplicación concreta a tus finanzas personales, especialmente en los ámbitos del ahorro y la inversión, pero también en la contención del gasto, la gestión de las deudas, tus seguros, tus productos financieros…

Cómo mejorar la inteligencia financiera

Además de contarte qué es la inteligencia financiera, queremos ofrecerte una serie de consejos que te permitirán mejorar tus habilidades a este respecto. Te detallamos a continuación, los trucos que pueden ayudarte a desarrollar tu inteligencia financiera:

• Analiza tu situación de partida: Saber cómo de saneadas estás tus finanzas personales será el primer paso para comprender cómo y dónde debes trabajar más para conseguir la salud de tu economía.
• Consigue un correcto equilibrio entre ingresos y gastos: En este post te contamos cómo reducir los gastos mensuales.
• No te endeudes más de lo necesario: Como ya hemos comentado en alguna otra ocasión, endeudarse no siempre es malo; el problema es cuando entras en una situación de sobreendeudamiento.
• Establece tus objetivos financieros: Una vez que has analizado cuál es tu situación y has conseguido mantener a raya tus gastos y deudas, es importante que establezcas tus propias metas.
• Ahorra: El ahorro debe ser uno de los principales objetivos financieros.
• Que tu dinero trabaje por ti: la inversión es la principal forma de poner a trabajar nuestro dinero.
• Piensa en el futuro: Asegurarse la salud financiera no sólo es importante en el momento actual, sino también de cara a un futuro en el que probablemente nuestro poder adquisitivo se reducirá.
• Aprende a gestionar el pago de tus impuestos: Optimizar el pago de impuestos es una buena forma de aportar coherencia a la gestión de tus finanzas personales.

Signos de que la inteligencia financiera funciona

Una vez que has aprendido qué es la inteligencia financiera y has seguido los pasos que te ayudarán a adquirirla y ampliarla, puedes repasar una serie de indicadores que te informarán sobre si lo estás haciendo bien en la gestión de la economía de tu hogar. Algunos de ellos son:

• Tus ingresos superan a tus gastos
• No has superado tu capacidad de endeudamiento
• Vas consiguiendo tus objetivos financieros
• Tienes productos de ahorro e inversión que te ayuden durante tu jubilación
• Obtienes otro tipo de ingresos más allá de tu nómina o facturas

La inteligencia financiera es la capacidad de gestionar correctamente nuestras finanzas personales. Sus principales áreas de actuación son la generación de ingresos, contención del gasto y las estrategias de ahorro. Se trata de habilidades que no son innatas, sino que se pueden adquirir y mejorar. La principal aliada para conseguir estas destrezas es la educación financiera; además hay una serie de trucos que te pueden ayudar a mejorar esta inteligencia financiera, que no es otra cosa que conseguir un correcto equilibrio entre ingresos y gastos, estrategias que nos permitan alcanzar nuestro objetivos financieros, pensar en el futuro y mantener nuestra salud financiera.

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