Los indicadores de inteligencia son herramientas utilizadas en el análisis de inteligencia para identificar tendencias y prever cambios importantes en un área específica. Estos indicadores se basan en datos históricos y ayudan a los analistas a realizar pronósticos basados en evidencias con un menor sesgo cognitivo.
Técnicas analíticas estructuradas
El análisis de indicadores es una técnica analítica estructurada utilizada por los analistas de inteligencia para eliminar el sesgo cognitivo, cuestionar los juicios intuitivos y crear argumentos claramente trazables que respalden las conclusiones analíticas.
Requisito
El requisito es la pregunta principal bajo escrutinio. Por lo general, se determina en función de las necesidades de un tomador de decisiones específico y define el alcance del problema a analizar.
Categorías
Las categorías son los diferentes aspectos del requisito que requieren un análisis individual para comprender completamente el problema. Por ejemplo, si el requisito es evaluar la estabilidad de un país, un analista deberá examinar las categorías de política, economía, consideraciones sociales y posiblemente otras más para obtener una comprensión clara de la situación en ese país.
Factores
Los factores son subconjuntos de una categoría. Por ejemplo, para comprender la situación política en un país, un analista deberá examinar la presencia de disturbios políticos, los niveles de corrupción, la relación del gobierno nacional con el ejército y posiblemente otros factores más.
Escenarios
Un escenario es una estimación personalizada de posibles resultados específicos que podrían resultar de una mejora o desestabilización en una categoría. Por lo general, estos escenarios se basan en eventos actuales de los factores involucrados en esa categoría.
Indicadores
Los indicadores son eventos o acciones dentro de un factor que señalan un cambio importante que afecta a las condiciones en otras categorías o en la misma categoría. También pueden ser una combinación de eventos que cumplen una función similar en conjunto. Gran parte del análisis de indicadores consiste en buscar los indicadores específicos que señalan una próxima perturbación, pero seguir cómo cambian los factores con el tiempo también puede resultar en un análisis de tendencias muy útil que aún se considera parte del análisis de indicadores.
En las últimas décadas, el tratamiento de datos ha experimentado una evolución significativa. La llegada del Big Data ha permitido procesar grandes cantidades de información en tiempo real, lo que ha revolucionado la forma en que las empresas utilizan los datos para tomar decisiones estratégicas.
En este contexto, los indicadores de inteligencia de negocios, también conocidos como KPI (Key Performance Indicators), juegan un papel fundamental. Estos indicadores son métricas que permiten medir el desempeño y eficacia de determinados objetivos establecidos previamente.
¿Qué es un KPI?
Un KPI es un indicador clave del desempeño que permite evaluar el grado de cumplimiento de un objetivo específico. Para que un KPI sea válido, debe cumplir con la condición smart :
- S (Specific): Específico y enfocado en un fin concreto en la estrategia.
- M (Measurable): Medible y comparable en diferentes períodos de tiempo.
- A (Achievable): Alcanzable, aunque esto puede ser subjetivo.
- R (Relevant): Relevante y representativo en el cumplimiento del objetivo.
- T (Time bound): Establecido dentro de un límite temporal.
Los KPI se utilizan para medir actividades complejas de cuantificar, como la productividad de una fábrica, el compromiso de los empleados o la fidelización de los clientes.
Tipos de KPI
Existen diferentes tipos de KPI que pueden ser utilizados por las empresas, entre ellos:
- Indicadores cuantitativos: Medibles con números.
- Indicadores cualitativos: No se pueden expresar fácilmente con números.
- Indicadores principales: Representan un resultado o proceso.
- Indicadores de retraso o lagging: Indican el éxito o fracaso después de haber ocurrido.
- Indicadores de entrada o input: Miden el consumo de recursos en un proceso.
- Indicadores de proceso o output: Reflejan la eficiencia o productividad de un proceso.
- Indicadores de resultados: Representan el resultado de las actividades del proceso.
- Indicadores prácticos: Indican la interacción entre diferentes actividades.
- Indicadores direccionales: Especifican si una organización está mejorando o no.
- Indicadores de acción: Indican la cantidad restante para realizar un cambio.
- Indicadores financieros: Miden el rendimiento económico de un proceso.
Ejemplos de KPI
A continuación, se presentan algunos ejemplos de KPI que pueden ser utilizados en diferentes departamentos de una empresa:
Departamento de ventas
- Número de productos vendidos.
- Número de pedidos.
- Ratio de conversión.
- Precio medio de las compras.
- Ratio de ocupación.
Departamento de atención al cliente
- Tiempo de respuesta en llamadas de atención al cliente.
- Volumen de llamadas para solicitar soporte.
- Ratio de satisfacción del cliente.
- Número de quejas de los clientes por semana.
- Rating del servicio al cliente.
Eficiencia empresarial
- Ciclo de tiempo para procesar un pedido.
- Duración de las llamadas entrantes.
- Número de personas involucradas en cada pedido.
Procesos de negocio
- Tiempo promedio para completar una tarea.
- Tiempo promedio de retraso en las fechas de las tareas.
- Desviación del tiempo en comparación con el programa planificado.
- Promedio de tareas solicitadas.
Estos son solo algunos ejemplos de los muchos KPI que pueden ser utilizados en una empresa. Los KPI permiten medir y evaluar el desempeño de diferentes áreas y procesos, lo que ayuda a las empresas a tomar decisiones más informadas y mejorar su eficiencia y rendimiento.
Según un estudio realizado, el indicador más fuerte del coeficiente intelectual (CI) de una persona es el CI de su madre. Este hallazgo sugiere que existe una fuerte influencia genética en la inteligencia de una persona.
No obstante, una vez que se sale del entorno escolar, el CI no es un predictor muy confiable del rendimiento. Controlando otros factores, las personas con altos CI no tienen necesariamente mejores relaciones o matrimonios, ni son mejores en la crianza de sus hijos. El CI solo predice aproximadamente el 4% de la variación en el rendimiento laboral y contribuye en un máximo del 20% al éxito en la vida.
Un estudio longitudinal conocido como el estudio Terman siguió a un grupo de estudiantes con un CI extremadamente alto. Aunque se esperaba que estos jóvenes brillantes tuvieran carreras destacadas, no hubo superestrellas en el grupo. En cambio, aquellos que tenían éticas de trabajo superiores eran los que parecían tener más éxito.
Es interesante destacar que, en general, los hombres tienden a sobreestimar su inteligencia, mientras que las mujeres tienden a subestimarla. Un estudio reveló que el 95% de los hombres estadounidenses creen que están en el 50% superior en habilidades sociales, mientras que las mujeres son más realistas y tienden a subestimar su CI en aproximadamente cinco puntos.
Aunque el CI de la madre puede ser un indicador fuerte de la inteligencia de una persona, hay muchos otros factores que influyen en el rendimiento y el éxito en la vida. La ética de trabajo, las habilidades sociales y otros aspectos individuales también desempeñan un papel importante.
Si quieres conocer otras notas parecidas a Indicadores de inteligencia: análisis y kpi puedes visitar la categoría Inteligencia.