La relación entre Fidel Castro y el Servicio de Inteligencia de la CIA es una historia maravilloso llena de conspiraciones, intentos de asesinato y una lucha constante por el poder. A lo largo de los años, Castro sobrevivió a numerosos intentos de asesinato por parte de la CIA, lo que le permitió mantenerse en el poder durante décadas. En este artículo, exploraremos algunos de los intentos de asesinato más notorios contra Castro y cómo esto afectó las relaciones entre Estados Unidos y Cuba.
Primeros intentos de asesinato
Según el director de la CIA Richard Helms, los funcionarios de la administración Kennedy ejercieron una fuerte presión sobre la CIA para desprenderse de castro. Esto explica la gran cantidad de conspiraciones de asesinato, con el objetivo de crear una impresión favorable en el presidente John F. Kennedy. Hubo cinco fases en los intentos de asesinato, con la participación de la CIA, el Departamento de Defensa y el Departamento de Estado: antes de agosto de 1960, de agosto de 1960 a abril de 1961, de abril de 1961 a finales de 1961, de finales de 1961 a finales de 1962 y de finales de 1962 a finales de 196Fidel Castro sobrevivió a más de 600 intentos de asesinato, así como a intentos de poner fin a su carrera política de otras maneras.
Uno de estos intentos involucró una sustancia química con efectos comparables a la droga LSD rociada en el aire de la habitación desde donde Castro transmitiría desde su estación de radio, con el objetivo de hacerlo perder la compostura y hablar de manera errática en el aire. Si bien este ejemplo puede no ser tan peligroso como un asesinato, de haber tenido éxito, este intento podría haber sido perjudicial para la carrera de Castro. Otro intento temprano se basó en el conocimiento de que le encantaba bucear. La CIA decidió crear un traje de buceo infectado que mataría lentamente a Castro, durante un largo período de tiempo, revistiendo el traje con tuberculosis. Sin embargo, este intento tampoco tuvo éxito.
El plan fue traicionado y Castro se enteró del intento. Según el columnista Jack Anderson, el primer intento de la CIA para asesinar a Castro fue parte de la operación de la invasión de Bahía de Cochinos, pero se enviaron cinco equipos más de la CIA, el último de los cuales fue capturado en un techo a distancia de tiro de Castro, a fines de febrero o principios de marzo de 196El abogado Robert Maheu, que estaba trabajando como intermediario de la CIA en ese momento, fue identificado como el líder del equipo, reclutando a John Roselli, un jugador con contactos en la mafia ítaloamericana y el entorno criminal cubano. La CIA asignó a dos oficiales de operaciones, William King Harvey y James O'Connell, para acompañar a Roselli a Miami y reclutar a los equipos reales.
La participación de la mafia
Uno de los aspectos más interesantes de la relación entre Castro y la CIA es la participación de la mafia en los intentos de asesinato. Durante la década de 1950, la mafia tenía una fuerte presencia en Cuba, especialmente en La Habana, donde controlaba casinos y otros negocios. Cuando Castro llegó al poder en 1959 y comenzó a nacionalizar la industria y expulsar a las empresas extranjeras, incluida la mafia, estas organizaciones criminales se convirtieron en enemigos de Castro y, a su vez, de la CIA.
La mafia estaba dispuesta a ayudar a la CIA en sus intentos de asesinar a Castro, ya que esto les permitiría recuperar sus negocios en Cuba. Sin embargo, estos esfuerzos conjuntos no tuvieron éxito y, en cambio, llevaron a un mayor deterioro de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba.
Reacciones y consecuencias
El Comité de la Iglesia rechazó el asesinato político como una herramienta de política exterior y declaró que era incompatible con los principios estadounidenses, el orden internacional y la moralidad. Recomendó al Congreso que considerara desarrollar una ley para erradicar tales prácticas, pero esto nunca se presentó. En 1976, el presidente Gerald Ford firmó la Orden Ejecutiva 11905, que declaraba que ningún empleado del gobierno de estados unidos participaría o conspiraría en asesinatos políticos.
En cuanto a la crisis de los misiles cubanos, fue un momento crítico en la Guerra Fría, donde Estados Unidos y la Unión Soviética estuvieron al borde de un conflicto nuclear. Después del intento fallido de Estados Unidos de derrocar al régimen de Castro en Cuba con la invasión de Bahía de Cochinos, la Unión Soviética acordó colocar misiles nucleares en Cuba como una medida disuasoria. Esto llevó a una confrontación directa entre Estados Unidos y la Unión Soviética, y solo se evitó una guerra nuclear gracias a las negociaciones y los compromisos alcanzados entre las dos superpotencias.
La relación entre Fidel Castro y el Servicio de Inteligencia de la CIA es un ejemplo maravilloso de la lucha por el poder y las conspiraciones políticas. Castro sobrevivió a numerosos intentos de asesinato por parte de la CIA, lo que le permitió mantenerse en el poder durante décadas. Estos eventos también tuvieron un impacto duradero en las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, y ayudaron a moldear la historia de la Guerra Fría. Aunque la relación entre Castro y la CIA ha terminado, su legado sigue vivo en la historia de Cuba y en la memoria de aquellos que vivieron estos tiempos tumultuosos.
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