El amor es un tema que ha sido objeto de reflexión y análisis a lo largo de la historia por parte de filósofos y pensadores. Según la filosofía, el amor debe ser inteligente, es decir, debe ir más allá de lo superficial y buscar la trascendencia humana para conectar con la belleza y la verdad que hay en el otro.
El amor según Platón
Uno de los filósofos más conocidos que abordó el tema del amor fue Platón. Según él, el amor es una locura divina y una comunión con la divinidad. Para Platón, amar es buscar la trascendencia humana y conectar con aquello que es eterno.
Platón distintutorial entre tres tipos de amor: el ágape, el filial y el eros. El ágape es un amor incondicional, que representa el compromiso absoluto y la fidelidad. El filial es el amor que nos damos entre familiares, amigos y compañeros. Y el eros es el amor que se da entre parejas, pero que va más allá del romanticismo.
Para Platón, el amor consiste en desear algo que no se posee, pero que es extremadamente bello y bueno. Uno no puede amar lo que es falso o lo que desconoce. Por lo tanto, el amante debe buscar qué es lo bello y lo bueno en la persona amada, y amarla por esas cualidades.
Según Platón, el amor platónico tal como lo conocemos actualmente es una tergiversación de su pensamiento. El amor platónico se queda en el primer escalón de la belleza física y no cumple el verdadero propósito del amor, que es buscar la trascendencia y la felicidad.
El amor según los griegos
La antigua civilización griega también tuvo su propia visión del amor. Los griegos clasificaban el amor en cuatro tipos fundamentales: Philia, Storage, Ágape y Eros.
La Philia es el amor que se da en las amistades, basado en el cariño y el afecto. Es un amor fraternal que busca promover el bien del otro. El Storage es el amor que se da en la familia, es un amor natural y se basa en el compromiso y la aceptación incondicional.
El Ágape es el tipo más fuerte de amor, es desinteresado y voluntario. Se basa en aceptar al otro a pesar de sus imperfecciones y implica una entrega absoluta. Por último, el Eros es un amor pasional y romántico, basado en la atracción física y la sensualidad.
Los griegos consideraban que el amor era más que una simple atracción física, era un vínculo de afecto que nacía de la valoración del otro y que inspiraba el deseo de su bienestar.
El amor inteligente
El amor inteligente, según la filosofía, implica ir más allá de lo superficial y buscar la belleza y la verdad en el otro. No se trata solo de encontrar algo, sino de querer recorrer el camino que lleva a la verdad.
El amor inteligente no se queda en el primer escalón de la belleza física, sino que busca la belleza del alma, las virtudes y el conocimiento. Es un amor que se hace cada vez más profundo a medida que se conoce y se comprende al otro.
El amor inteligente, según la filosofía, es aquel que nos impulsa a buscar la trascendencia humana y a conectar con lo eterno. Es un amor que nos lleva a buscar la felicidad y a contemplar la verdad que hay en el otro.
Según la filosofía, el amor debe ser inteligente, es decir, debe ir más allá de lo superficial y buscar la trascendencia humana. Tanto Platón como los griegos consideraban que el amor implica buscar la belleza y la verdad en el otro.
El amor inteligente no se queda en la belleza física, sino que busca la belleza del alma y del conocimiento. Es un amor que nos impulsa a buscar la felicidad y a conectar con lo eterno.
El amor debe ser inteligente según la filosofía, ya que implica ir más allá de lo superficial y buscar la trascendencia humana. Es un amor que nos lleva a buscar la belleza y la verdad en el otro, y que nos impulsa a ser mejores personas.
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