En la era digital en la que vivimos, la tecnología se ha convertido en una herramienta fundamental en nuestra vida diaria. No solo nos facilita tareas cotidianas, sino que también ha demostrado tener un impacto positivo en el desarrollo de nuestra inteligencia. A través de dispositivos electrónicos y el uso de internet, la tecnología puede potenciar nuestras habilidades mentales y cambiar nuestra manera de relacionarnos. En este artículo exploraremos cómo influye la tecnología en la inteligencia humana y cómo podemos sacarle el máximo provecho.
El valor de la multitarea
La concepción tradicional de la inteligencia como un valor unitario y cuantificable ha quedado obsoleta. La psicología y la neurociencia moderna han demostrado que existen distintas inteligencias y que cada individuo tiene fortalezas en diferentes áreas. Por ejemplo, hay personas que son muy buenas en matemáticas pero no tienen habilidades destacadas en lingüística.
La tecnología, sin embargo, puede ayudarnos a potenciar estas habilidades distintas y fomentar nuestra capacidad multitarea. Aplicaciones como Neuoronation o Lumosity entrenan nuestro cerebro y fortalecen nuestra memoria, mientras que ciertos videojuegos son beneficiosos para mejorar en lógica y cálculo.
Es importante destacar que cada vez más utilizamos dispositivos móviles para conectarnos a internet. Según un estudio de We are social, el uso de ordenadores para navegar por internet ha disminuido en un 9% en el último año, mientras que el uso de teléfonos móviles ha aumentado en un 39%. Esta conectividad constante puede tener efectos negativos en nuestra memoria y nuestra socialización, pero también puede ser positiva para adquirir nuevos conocimientos y desarrollar nuestra agilidad mental.
'Tablets' para mejorar el aprendizaje
La irrupción de las nuevas tecnologías en el ámbito educativo ha llevado a replantear la forma en que educamos a los niños. Según Howard Gardner, psicólogo y profesor de Harvard, la tecnología en las aulas fomenta una educación más personalizada y creativa, cambiando el papel tradicional del profesor y aumentando el interés de los estudiantes por la materia.
Por otro lado, el filósofo José Antonio Marina advierte que si bien la tecnología puede ayudar a desarrollar la capacidad multitarea y la velocidad de asociación y respuesta de los estudiantes, también puede disminuir la memoria a largo plazo y el tiempo dedicado a las interacciones personales directas. Marina propone perfeccionar los sistemas de aprendizaje para aprovechar las ventajas de las tecnologías de la información y comunicación (TIC) y mitigar sus desventajas.
Un ejemplo de esto es el programa educativo mSchools en Cataluña, el cual tiene como objetivo reducir la tasa de abandono escolar e impulsar las habilidades tecnológicas de los estudiantes. A través de este programa, los estudiantes de secundaria trabajan en la creación y uso de soluciones móviles, lo que les permite adquirir habilidades tecnológicas y mejorar su aprendizaje.
Prepararse para un entorno nuevo
Otro beneficio del uso de la tecnología es que nos ayuda a prepararnos para un futuro cada vez más digitalizado. El Big Data, la realidad virtual y la programación serán conceptos cotidianos en unos años, y aquellos que estén familiarizados con ellos tendrán ventaja en el mercado laboral. Afortunadamente, existen aplicaciones como Hopscotch que nos permiten aprender a programar desde nuestros teléfonos móviles, y en internet encontramos miles de herramientas para desarrollar nuestras habilidades en el manejo de dispositivos móviles.
Incluso los más pequeños tienen acceso a aplicaciones como Infantium, las cuales adaptan sus contenidos para reforzar los aspectos que más les cuestan. Sin embargo, los expertos recomiendan que los padres supervisen el uso tecnológico de sus hijos, al menos hasta los doce años. Esto no significa que los niños no puedan jugar con sus tablets o aprender con sus smartphones, sino que deben hacerlo de forma progresiva, medida y bajo la vigilancia de un adulto. De esta manera, la tecnología puede potenciar sus inteligencias múltiples sin generar problemas adicionales.
Consultas habituales
- ¿La tecnología puede mejorar nuestras habilidades mentales?
- ¿Cómo afecta el uso de dispositivos móviles a nuestra memoria y socialización?
- ¿Qué beneficios tiene el uso de la tecnología en el ámbito educativo?
- ¿Cómo podemos prepararnos para un futuro digitalizado?
Sí, a través de aplicaciones y juegos diseñados específicamente para entrenar el cerebro, podemos fortalecer nuestra memoria, lógica y cálculo.
El uso excesivo de dispositivos móviles puede tener efectos negativos en nuestra memoria y en nuestra capacidad para interactuar socialmente de manera directa.
La tecnología en las aulas puede fomentar una educación más personalizada y creativa, aumentando el interés de los estudiantes por la materia y mejorando su aprendizaje.
A través de aplicaciones y herramientas disponibles en internet, podemos adquirir habilidades en el manejo de dispositivos móviles, programación y otras tecnologías emergentes.
La tecnología ha demostrado ser una herramienta poderosa para potenciar nuestras habilidades mentales y adaptarnos a un entorno cada vez más digitalizado. A través de dispositivos electrónicos y el uso de internet, podemos desarrollar nuestras inteligencias múltiples, mejorar nuestro aprendizaje y prepararnos para los desafíos del futuro. Sin embargo, es importante utilizar la tecnología de manera responsable y supervisada, especialmente en el caso de los niños, para evitar posibles efectos negativos. La tecnología puede ser una aliada en nuestro crecimiento y desarrollo, siempre y cuando la utilicemos de manera consciente y equilibrada.
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