La conducción autónoma es un concepto revolucionario que está transformando la industria automotriz. Los automóviles con conducción inteligente son vehículos capaces de realizar diversas funciones de conducción sin necesidad de intervención humana. Estos vehículos utilizan sistemas avanzados de asistencia al conductor (ADAS) que permiten una mayor seguridad y comodidad en la experiencia de conducción.
¿Qué son los coches autónomos?
Un coche autónomo es aquel que puede realizar todas las funciones de conducción entre un origen y un destino sin necesidad de intervención humana. Aunque actualmente no existen coches autónomos en el mercado, se están desarrollando proyectos que buscan llevar esta tecnología a la realidad. Es común ver vídeos de propaganda en los que se muestra un coche en marcha sin intervención del conductor, pero estos vídeos suelen ser realizados en entornos controlados y con condiciones ideales de clima y tráfico.
Los coches autónomos se basan en los sistemas avanzados de asistencia al conductor (ADAS), que son asistentes a la conducción diseñados para evitar accidentes. Estos sistemas utilizan sensores para calcular distancias, detectar objetos y analizar la situación del tráfico. Con la información que recopilan, el vehículo puede tomar decisiones preestablecidas y actuar sobre el acelerador, los frenos o la dirección. Además, estos sistemas pueden advertir al conductor en caso de detectar situaciones de riesgo que requieran su intervención.
Niveles de conducción autónoma
La Sociedad de Ingenieros Automotrices (SAE) ha definido seis niveles de conducción autónoma, del 0 al El nivel 0 se refiere a un vehículo que no cuenta con ninguna función de conducción autónoma, mientras que el nivel 5 implica que el vehículo no requiere intervención humana para ninguna tarea. En la actualidad, los coches más avanzados del mercado se encuentran en el nivel 2+ o, en condiciones muy específicas, en el nivel
Tener en cuenta que, en España, la ley no permite que el conductor suelte el volante durante la conducción. Por lo tanto, no está permitido hacer uso de un nivel 3 de conducción autónoma o superior, aunque la tecnología lo haga posible. Sin embargo, en algunos estados de los Estados Unidos, como California, se permite el uso de conducción semi-autónoma que implica soltar los mandos del coche.
Tecnología en los coches autónomos
Para que un coche pueda circular sin intervención del conductor, es necesario que cuente con una serie de sensores, como radares y cámaras, que le permitan detectar objetos y analizar el entorno. Además, el vehículo debe poder intercomunicarse con otros vehículos e incluso con la infraestructura vial para obtener información del estado del tráfico, de la vía y de posibles incidencias. Esto requiere de un entorno dotado de inteligencia artificial, que puede lograrse a través del internet de las cosas.
Actualmente, algunos coches del mercado cuentan con capacidades limitadas de conducción sin conductor, como funciones de aparcamiento remoto. Estas funciones permiten al conductor maniobrar el coche desde un dispositivo externo, como la llave o un teléfono móvil. Sin embargo, siempre hay intervención humana en estas situaciones, ya que los coches sin conductor aún no son una realidad.
Para que los coches autónomos sean una realidad, es necesario que la inteligencia artificial y el concepto de coche conectado avancen. Estos dispositivos deben ser capaces de aprender de las diferentes situaciones que pueden ocurrir en la conducción y permitir a los desarrolladores crear nuevos patrones de respuesta ante imprevistos. En situaciones no previstas, los coches autónomos actuales requieren la intervención inmediata del conductor, ya que no tienen capacidad de decisión propia.
Los primeros coches con nivel 3 de conducción autónoma
A partir del segundo semestre de 2023, algunas marcas han comenzado a anunciar la disponibilidad de sus sistemas de conducción autónoma de nivel Estos sistemas están regulados por la nueva normativa de seguridad europea y permiten al vehículo manejar la conducción en ciertos tramos de autopista bajo condiciones específicas. En España, se está desarrollando el marco legal relacionado con la conducción autónoma, y la reciente Ley de Seguridad Vial ha incorporado el concepto de vehículo automatizado.
Entre los sistemas de conducción autónoma de nivel 3 se encuentra el Ford BlueCruise, que ya está disponible en España para los clientes del Mustang Mach-E. Este sistema permite la conducción sin manos, con la vista en la carretera en determinadas secciones de autopistas y autovías autorizadas. También está el Mercedes-Benz DRIVE PILOT, que ha sido lanzado en Estados Unidos y es el primer sistema certificado de conducción automatizada condicional de nivel 3 según la clasificación SAE.
Estos avances en la tecnología de conducción autónoma están marcando un hito en la industria automotriz y prometen mejorar la seguridad y la comodidad en la experiencia de conducción. A medida que la tecnología continúa evolucionando, es probable que veamos más avances en este campo y que los coches autónomos se conviertan en una realidad en un futuro próximo.
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