La tecnología de identificación por radiofrecuencia, también conocida como RFID, ha tenido un largo recorrido en su desarrollo y aplicación. A lo largo de los años, diferentes investigadores han contribuido a su evolución, aprovechando los avances en otros campos tecnológicos para llegar a la tecnología RFID que conocemos hoy en día.
El origen de la tecnología RFID
Aunque no hay un descubridor o inventor claro de la tecnología RFID, se puede rastrear su historia hasta principios del siglo XX. Uno de los antecedentes más notables se remonta al final de la Segunda Guerra Mundial, cuando Léon Theremin, un inventor soviético, creó una herramienta de espionaje para la Unión Soviética.
Esta herramienta consistía en una antena conectada a un cilindro que funcionaba como micrófono. Fue insertada en una figura regalada al embajador estadounidense en la Unión Soviética y colocada en su despacho. Esta figura capturaba las señales de un transmisor ubicado fuera de la embajada, que era apuntado hacia ella por soldados soviéticos. Luego, transmitía el sonido de las voces en la sala.
Este invento fue descubierto en 1960 y presentado como prueba de espionaje soviético en las Naciones Unidas. Actualmente, se encuentra en exhibición en el Museo Criptológico Nacional de la NSA.
Los primeros pasos de la tecnología RFID
Los avances científicos y tecnológicos a menudo comienzan con aplicaciones militares, y la tecnología RFID no es una excepción. Durante la Segunda Guerra Mundial, se utilizaron radares para detectar aviones enemigos. Sin embargo, había un problema: los radares no podían identificar si los aviones detectados eran amigos o enemigos.
Para solucionar este problema, los pilotos de la Royal Air Force (RAF) descubrieron que si rodaban sus aviones mientras se acercaban, la señal de radar reflejada cambiaba. Esto les permitía distinguir si los aviones eran amigos o enemigos.
Al mismo tiempo, el físico escocés Sir Robert Alexander Watson-Watt, inventor del radar, desarrolló un sistema para identificar amigos o enemigos (IFF). Este sistema consistía en instalar un transmisor en cada avión británico, que recibía las señales del radar y emitía una señal que los identificaba como amigos. Este concepto básico es el que subyace en la tecnología RFID.
A partir de estos primeros avances, se necesitaron más desarrollos científicos para convertir la tecnología RFID en lo que es hoy en día. La combinación de tecnología de radiodifusión y radar sentó las bases de la tecnología RFID. En esencia, un transmisor envía una señal que es reflejada por un transpondedor en el sistema RFID pasivo, o bien, este transpondedor responde transmitiendo una señal a un sistema RFID activo.
En 1948, Harry Stockman publicó communications by means of reflected power en Proceedings of the IRE, considerado el nacimiento oficial de la tecnología RFID.
El auge de la tecnología RFID
En las décadas de 1950 y 1960, se realizaron numerosos estudios para desarrollar sistemas seguros de RFID aplicables en diferentes campos, como la minería, la exploración petrolera, las instalaciones nucleares, los controles de acceso y los sistemas antirrobo.
A finales de la década de 1960, se fundaron las empresas Sensormatic y Checkpoint, quienes desarrollaron un sistema de vigilancia electrónica anti-intrusión llamado Electronic Article Surveillance (EAS). Este fue el primer desarrollo comercial de la tecnología RFID y marcó el inicio de su explosión en la década de 1970.
En 1973, se otorgaron las primeras patentes relacionadas con la tecnología RFID. Mario W. Cardullo obtuvo una patente por su etiqueta RFID activa con memoria regrabable, mientras que Charles Walton recibió una patente por su transpondedor pasivo utilizado para desbloquear puertas sin llaves.
A lo largo de las décadas de 1970 y 1980, la tecnología RFID se desarrolló en diversas direcciones, desde sistemas de control de peajes hasta sistemas de seguimiento de personas en hospitales y oficinas.
En la década de 1990, IBM patentó el sistema RFID de ultra alta frecuencia (UHF), lo que marcó una nueva revolución en la tecnología RFID y en las etiquetas RFID.
Los antecedentes de las tarjetas inteligentes RFID se remontan a principios del siglo XX, con diversos investigadores y avances tecnológicos que sentaron las bases de esta tecnología. Desde su origen en aplicaciones militares hasta su explosión comercial en la década de 1970, la tecnología RFID ha evolucionado y se ha convertido en una parte fundamental de muchos procesos y negocios en la actualidad.
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