Desde siempre, las personas han buscado mejorar el confort en sus hogares. Esta búsqueda constante ha llevado a desarrollar tecnologías que permiten la automatización de una vivienda, dando origen a la domótica. Los sistemas domóticos no solo brindan comodidad, sino también eficiencia energética, seguridad y comunicación. A lo largo de los años, la tecnología domótica ha evolucionado para llegar a la forma en que la conocemos hoy en día.
Los primeros datos de casas inteligentes
El origen de la domótica se atribuye a Joel Spira, quien en 1959 trabajaba para una empresa aeroespacial. Durante el desarrollo de un proyecto, se le ocurrió la idea de utilizar un tiristor, un dispositivo electrónico, para controlar la intensidad de la luz en las bombillas. Hasta ese momento, esto se realizaba con reóstatos que eran grandes y costosos. La invención de Spira permitió reducir los costos de implementación y llevar la automatización a los hogares. Esta invención sentó las bases para el control remoto y la automatización de los hogares.
En 1966 se comercializó ECHO IV, el primer dispositivo capaz de controlar varias tareas del hogar de forma automática. Con ECHO IV, se podía controlar la televisión, la temperatura del hogar y programar el despertador, entre otras cosas. Sin embargo, este dispositivo era muy grande y difícil de usar, por lo que no tuvo mucho éxito en el mercado. A pesar de esto, sentó las bases para la domótica actual.
La domótica con la llegada de Internet
Con la popularización de Internet en los años 90, se comenzaron a desarrollar servicios de teleasistencia conectados a centralitas remotas. Esto permitió mejorar una gran cantidad de servicios relacionados con la domótica. Desde ese momento, los electrodomésticos del hogar comenzaron a adaptarse para poder conectarse a Internet, lo que les permitió contar con funciones remotas y adaptarse a diferentes variables.
La llegada del smartphone
Con la llegada del smartphone, se logró centralizar todas las mejoras de la domótica en un dispositivo móvil. A través de aplicaciones móviles, se puede controlar y gestionar el sistema domótico del hogar de forma sencilla y conveniente.
Protocolo Zigbee
Con la evolución de la tecnología domótica, se ha llegado al protocolo Zigbee. Este protocolo de comunicación inalámbrico permite que los componentes del sistema domótico formen una red inalámbrica, transmitiendo datos entre sí sin necesidad de conexión Wi-Fi. Algunos dispositivos funcionan como enrutadores, lo que significa que pueden transmitir datos a dispositivos que se encuentren fuera de su alcance utilizando otros componentes intermedios. Esta red inalámbrica es confiable y eficiente, ya que si falla un enrutador, el componente encontrará una ruta alternativa. En Remihome utilizamos el protocolo Zigbee en nuestro sistema domótico, lo que nos permite ofrecer un funcionamiento pleno sin necesidad de conexión a Internet.
Asistente virtual por voz
Actualmente, no solo es posible controlar el sistema domótico del hogar desde un dispositivo móvil, sino también a través de asistentes virtuales por voz, como Alexa de Amazon. La integración de Remihome con Alexa permite acceder a dispositivos individuales y rutinas complejas configuradas por los usuarios. Esto permite controlar la domótica del hogar de forma cómoda y sencilla utilizando comandos de voz.
La domótica en la actualidad
El objetivo de la domótica se ha logrado mediante la utilización de sistemas domóticos que hacen que los hogares sean más cómodos, seguros y eficientes energéticamente. En la actualidad, es posible controlar y automatizar la iluminación, la temperatura, las persianas y muchos otros aspectos del hogar. Esto mejora el confort en el hogar y contribuye al ahorro energético y la sostenibilidad.
La domótica en casa cada vez está al alcance de un mayor número de hogares, ya que las instalaciones domóticas son más económicas y accesibles. Incluso, muchos promotores inmobiliarios optan por incluir sistemas domóticos en sus viviendas de nueva construcción.
La domótica ha experimentado una evolución significativa a lo largo de los años. Desde los primeros intentos de automatizar las tareas del hogar hasta la actualidad, donde es posible controlar y gestionar todos los aspectos de una casa inteligente desde un dispositivo móvil o con comandos de voz. La domótica ha mejorado el confort en el hogar, ha contribuido al ahorro energético y ha facilitado la vida de las personas. Con el avance de la tecnología, es probable que la domótica siga evolucionando y ofreciendo nuevas soluciones para hacer nuestros hogares aún más inteligentes.
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